Impacto emocional del diagnóstico
El diagnóstico de cáncer de mama tiene un impacto psicológico. La mayoría de las mujeres experimentan sentimientos de ansiedad, incertidumbre, miedo, tristeza, etc.
Una de las emociones que se despierta a raíz de esta enfermedad es el miedo, que se desencadena al asociarse inevitablemente con la idea de muerte. Adaptarse a vivir con una enfermedad exige tiempo, paciencia, apoyo e interés por participar en el cuidado de la propia salud.
Aprender a afrontar esta nueva situación es un proceso. Entender qué te ocurre y participar activamente en el cuidado de la propia salud ayuda a afrontar los nuevos retos que van apareciendo.
TIPS
- Pregunta tus dudas a tu profesional de referencia. Es mejor tener la información para poder manejar más fácilmente y así buscar los recursos necesarios antes de cualquier situación que pueda ocurrir. Es importante sentirte una participante más de tu proceso y tener un sentimiento de confianza y respeto con el/la profesional.
- Lleva un registro de las citas de tratamientos, pruebas, resultados, al igual que de los efectos secundarios que vayas sintiendo. Una agenda puede ser tu gran aliada en este momento.
- No intentes llevar el peso todo por ti misma. Apóyate en tu entorno que te esté brindando ayuda, ellos y ellas se sentirán mucho mejor sabiendo que te están pudiendo ayudar.
- Si la situación te sobrepasa y estás pensando que la medicación puede ser un recurso: ES IMPORTANTE CONSULTAR A UN PROFESIONAL, Y LO IDEAL A UN PROFESIONAL DE SALUD MENTAL.
No es depresión, es adaptación
En muchas ocasiones, desde el diagnóstico del cáncer de mama aparecen emociones desagradables y sintomatología que se pueden confundir con algunos trastornos mentales. Y es aquí donde aparece la tan nombrada DEPRESIÓN. En este caso ponemos los criterios que pueden dar lugar a pensar que podría existir tal depresión.
Lo importante es que ESTE DIAGNÓSTICO SIEMPRE LO TIENE QUE DAR UN PROFESIONAL DE LA SALUD MENTAL, es decir, psiquiatra o psicólogo.
Criterios Depresión
Bien es cierto que para el diagnóstico de un trastorno depresivo mayor deben cumplirse algunos criterios como estado de ánimo depresivo, marcada disminución del interés o del placer en todas o casi todas las actividades durante la mayor parte del día o insomnio, entre otros.
Pero existe un criterio de exclusión:
El episodio no es atribuible a los efectos fisiológicos directos de una sustancia (por ejemplo una medicación, en este caso quimioterapia, radioterapia, hormonoterapia, etc.) ni una enfermedad médica general (por ejemplo cáncer de mama).